En 1999 abrimos la Clínica Veteralia Sant Cugat con un objetivo claro: mejorar el bienestar de perros, gatos y otras mascotas.
En 2006, esta misma visión nos llevó a integrarnos en el grupo Veteralia, sumando la experiencia y los recursos de un equipo más amplio para ofrecer un cuidado aún más completo a nuestros pacientes.