Propiocepción proviene del latín proprius, que significa «propio». Propiocepción significa captar la propia posición en el espacio, incluida la posición de las extremidades entre sí y con el cuerpo en su conjunto.
Hay miles de millones de sensores en todo el cuerpo de su perro que envían constantemente mensajes neurológicos al cerebro de su perro. Estos sensores, también llamados propioceptores, están presentes en la piel, los músculos, los tendones y los tejidos alrededor de las articulaciones.
A medida que tu perro se mueve, debe controlar continuamente su postura y ajustar la actividad muscular según sea necesario para proporcionar equilibrio. Los propioceptores detectan estos movimientos y permiten una ejecución rápida, inconsciente y precisa de estos comportamientos. Envían mensajes a lo largo de tractos nerviosos especializados que contienen información sobre las posiciones exactas de las extremidades, la cabeza y el resto del cuerpo, así como qué tan rápido y en qué dirección se mueven esas partes del cuerpo y cuánta carga están soportando para que se puedan realizar correcciones instantáneas. Si la estimación de su perro de la posición inicial de su extremidad es incorrecta, la propiocepción es crucial para corregir el movimiento. Por lo tanto, si su perro comete un error en la colocación del pie, el sistema de propiocepción intentará corregirlo instantáneamente. ¡Es fundamental en la prevención de lesiones!
A las 3 semanas de edad, cuando los cachorros comienzan a caminar y explorar su mundo, tienen más neuronas de las que jamás tendrán. Para que el sistema neurológico propioceptivo se desarrolle de manera óptima, los cachorros jóvenes necesitan experimentar muchos estímulos ambientales. Necesitan moverse a diferentes velocidades sobre diferentes tipos de terreno y explorar tantos objetos nuevos como sea posible. Eso les ayudará a retener todos esos importantes propioceptores, nervios y tractos espinales.
Alrededor de 1 a 1 ½ años de edad, todo está en su sitio y completamente desarrollado, por lo que tu perro realmente sabe lo que está haciendo con su cuerpo, gracias a la propiocepción. Esta es una de las razones por las que muchos profesionales recomiendan retrasar un entrenamiento físico excesivamente intenso para reducir el riesgo de lesiones hasta que el cuerpo esté maduro.
La propiocepción es super importante no sólo para nuestros perros y gatos en su día a día, ayuda a mejorar su performance en cualquiera de los deportes que practique.
Tan importante es practicar o entrenar la propiocepción cómo hacerlo de manera correcta, es fundamental sentar unas buenas bases del ejercicio, teniendo siempre presente los grupos musculares que queremos trabajar, y siempre realizar los ejercicios tras una evaluación veterinaria tanto a nivel muscular como osteoarticular para descartar alteraciones o patologías, y así poder realizar la correcta elección de ejercicios o las modificaciones de ejercicios necesarias. Reserva tu cita online hoy mismo.